A todas las personas nos gusta disfrutar de áreas limpias, sin desperdicios y sin ningún tipo de riesgos, en especial cuando caminamos por la arena o la playa.
No es nada agradable conseguir colillas de cigarro, plásticos, botellas, papeles o latas, fuera de los contenedores de basura.
Es por ello que debemos adoptar medidas para disfrutar de nuestro club y de las costas del Litoral Central de manera más sostenible.
Las botellas de vidrio y las latas representan un riesgo potencial para la seguridad de las personas que disfrutan de la playa, así como para la fauna y la flora marina.
Las botellas de vidrio pueden romperse y causar serias lesiones a los bañistas que andan descalzos, a los niños que juegan en la arena y hasta a los animales que pueden confundir los trozos por comida.
Asimismo, los vidrios rotos pueden causar cortes profundos e infectar las heridas fácilmente.
En caso de abandonar estos residuos, el vidrio absorbe la radiación solar, se incrementa su temperatura y genera riesgo de roturas.
Con las latas suele pasar lo mismo, además que algunos animales pueden quedar enganchados en los anillos de estos envases.
Entre los principales residuos abandonados en las playas es común encontrar en más de un 18% botellas vidrios o un 29% de latas, sin contar los plásticos o demás desperdicios que suelen contaminar las playas.
El vidrio y el aluminio no son productos biodegradables, tardan cientos de años en descomponerse, y mientras tanto, pueden contaminar la playa y el océano.
Así que cuando vayas a compartir un día de arena, sol y mar con la familia o los amigos te recomendamos usar algunos termos o vasos que te permitan ingerir tus bebidas con recipientes que retornes a tu hogar.
De esta forma podemos disfrutar de la playa de manera segura y proteger el medio ambiente y la vida marina.