Disfruta del sol sin sacrificar tu piel

Un bronceado dorado y uniforme es el sueño de muchas personas. Sin embargo, conseguirlo sin poner en riesgo la salud de la piel requiere de algunos cuidados y hasta estrategias para evitar daños.

En este sentido se debe tomar en cuenta el FPS, que significa Factor de Protección Solar y es la medida de capacidad que tiene un protector solar para evitar que los rayos ultravioletas dañen la piel. 

De acuerdo con la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias, funciona de la siguiente manera: si la piel sin protección tarda 20 minutos en empezar a ponerse roja, al utilizar una crema solar con un FPS de 15 el enrojecimiento tardará en aparecer teóricamente 15 veces más (alrededor de cinco horas).

Un FPS 15 bloquea aproximadamente el 93% de todos los rayos UVB, FPS 30 el 97%, y un FPS 50 el 99%.

¿Cómo usar correctamente el bronceador?

  • Aplícalo antes de salir de casa, unos 30 minutos previos a la exposición solar.
  • Colócalo de forma uniforme y sé generoso, la cantidad de crema recomendada es de 2mg/cm2, lo que equivale a 6 cucharadas de café para un adulto de talla media.
  • Utiliza factor de protección solar (SFP) por encima de 30 y que proteja frente a las radiaciones ultravioletas. 
  • En el caso de los niños, aplícalo con mayor frecuencia especialmente si juegan de forma continua en el agua o en días soleados
  • Evita confiarte de los días nublados porque las radiaciones solares atraviesan las nubes.
  • No es recomendable aplicar ningún protector de forma regular en niños menores de 6 meses. Mejor evitar la exposición solar directa.

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